Por poco y me caigo. Tantito así y me voy.
No sé realmente si es que es verdad O ni siquiera que será mentira de mi mente (podrida) que empieza a morir cada vez que ha nacido. No sé si es la realidad que no me soporta y que se vuelve tan necia que no para de verme, de frente, a la cara como si me pensara, como si me escuchara, como si me acudiera Me desespera, un soplo, bendito. Y yo, que no hago más que estar callada, que siempre E inclusive la gente, e inclusive los años… me congelo, deslumbrada Me horrorizo abismada Me resuelvo recóndita, y ¿dónde? ¿Dónde mierda estás? Debo implosionar. Escondida. Y no sale la sombra que me persigue, la sombra tan honda que acecha celosa, en el peor lugar de todos, el más incestuoso. Y retumba, para hacerme cosquillas. Vomito, poco. Cruzo las líneas, ciega. Abismada hacia adentro, abismada por fuera. Flor con barro, lluvia y arena. Tanto tiempo sin verte me hace sentir fuera.