La casa del árbol.

Dejó solo esta nota, no me dice nada importante y no creo que regrese antes de la media noche, nunca llega antes de la media noche.
Bien, entonces abrígate y ven para mi casa, tengo algo que mostrarte – dijo Juan Jo en voz baja.

Almudena colgó el auricular y salió tan rápido como pudo. Camino durante 20 minutos, el frío le entraba por la cara, las orejas se le congelaban, sentía que se le iban a caer en pedazos, hasta que por fin llegó. ¡Hey Juan Jo! ¡Ya llegué! – gritó desde abajo.

Juan Jo salió por la ventanita del lado y le hizo un gesto. Por el lado más grueso del árbol, lanzó una soga y la ayudó a subir. Una vez arriba, Almudena se acomodó en una esquinita de la pequeña casa, sobándose las manos y soplando aire caliente entre ellas. - ¿Qué cosas me quieres mostrar? Hazlo rápido porque tengo que irme cuanto antes, si se dan cuenta que salí, me matan –

Juan Jo se quedó mudo. – la verdad es que no tengo nada en especial que enseñarte, es solo que quería verte. Decirte algo.

¿Para eso me has hecho venir hasta acá? ¿Sabes en el problema que me metería si llega antes de la media noche y no me encuentran en casa? ¡No entiendes nada! – le dijo Almudena mientras hacia el amague de bajar del árbol.
Juan Jo la tomó del brazo y le dijo: - quiero que te quedes a vivir desde hoy aquí, conmigo, ya no quiero que regreses a tu casa, no quiero que te hagan nunca más nada.

Si me quedo acá y me llegan a descubrir, no solo me harán algo, si no que puede ser lo último que me hagan. ¿Me dejo entender? Tengo que irme. Hablamos otro día que estés más lúcido. – hablo seriamente Almudena

Tengo todo preparado, no me tomes por tonto ¿por qué quieres volver ahí? ¿Acaso no te gustaría cambiar de vida? No nos vamos a quedar mucho tiempo por esta zona. Solo será por unos días, luego partiremos lejos. No podrán encontrarte jamás, he juntado mucho dinero. Hasta podrás estudiar.

¿Y qué quieres que me quede hoy? ¿Así? ¿Sin ropa? ¿Sin nada?- contestó Almudena

Así levantaras menos sospechas, pensaran que te has perdido, tendremos más tiempo… si vuelves ahora, se darán cuenta de lo que piensas hacer, tú no sabes mentir. Si vuelves ahora, se que ya no vendrás conmigo. No te das cuenta, es ahora o nunca…

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